La esquizofrenia a nivel mundial tiene una prevalencia del 1% y con heredabilidad hasta del 80%. Los estudios de ligamiento genético, convergencia genómica, asociación y aberraciones cromosómicas han contribuido a la identificación de genes de susceptibilidad y a establecer marcadores moleculares asociados a esta enfermedad. En Cuba se han realizado varios estudios encaminados además a profundizar en los factores culturales, ambientales y las células del líquido amniótico en mujeres a riesgo de tener una descendencia de esquizofrenia. (1,2,3,4)